NOTA DE PRENSA 20/12/2011
Los hospitales de La Mancha deben seguir siendo públicos
Hospitales levantados con dinero de las contribuyentes y de trayectoria intachable se venden a la empresa privada.Sin consultas ni mesas de diálogo con los agentes implicados.En la provincia de Ciudad Real, son los centros de Manzanares y Tomelloso los damnificados de la convulsa política del ejecutivo regional de descapitalización del sistema público.
Si en algo se ha distinguido el Hospital Virgen de Altagracia de Manzanares en casi cuatro décadas ha sido en la prestación de un excelente servicio y en la calidad asistencial y docente de sus profesionales clínicos.Hace pocos años fueron ampliadas sus instalaciones, en un esfuerzo inversor importante y del que se han beneficiado la plantilla y las usuarias.
La lucha por un hospital en Tomelloso significó en su momento una reivindicación de hondo calado social y se consiguió gracias al esfuerzo de una plataforma ciudadana y a la movilización del pueblo de Tomelloso, cansado del agravio histórico con respecto a otras localidades de la comarca.Hablamos de un hospital con una extensa oferta de servicios para su corta vida, tanto en las áreas médica, quirúrgica, ginecológica o pediátrica, como en consultas externas.
La adquisición y gestión de sendos centros por multinacionales como ACS y Capio inducen a temer que el rigor profesional, así como una parte del conjunto de oferta de servicios, van a resentirse, al mismo tiempo que la renovación o modernización de las técnicas y tecnologías médicas y quirúrgicas.Los servicios de Urgencias palidecerán; un dato ilustrativo es que la UVI Móvil podría desaparecer en Tomelloso.
El retroceso de los derechos laborales va intrínsecamente ligado a la transferencia, cesión o venta de estas instalaciones y servicios a la iniciativa privada.
La pérdida de la titularidad pública, o la “gestión combinada” de los complejos sanitarios de Manzanares y Tomelloso se traducirán en una reducción palpable de los índices de prosperidad y riqueza; la fuga de
especialistas, ATS, celadoras, administrativas y resto de trabajadoras a otros centros quedará reflejada en un descenso del consumo y alquiler de determinados bienes y servicios (hostelería, vivienda, alimentación, etc).
El consejero de Sanidad y el alcalde de Tomelloso han mentido clamorosamente, negando la mayor, esto es, que los hospitales de las dos poblaciones no pasarían a manos privadas.La única salida digna que les queda es la inmediata dimisión.
EeA de Ciudad Real se apunta a las movilizaciones anunciadas, muestra su solidaridad con el colectivo sanitario y no sanitario afectados, y anima a la ciudadanía a que no se deje avasallar por la política aventurera y de rapiña del gobierno de Cospedal contra la educación y la sanidad pública, o la protección social, defendiendo lo que le pertenece en los plenos municipales, en las calles y en las plazas.
Contacto: Manuel
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